A la Junta de Gobierno del Colegio de Economistas de Madrid.

Declaración de ECONOMISTAS FRENTE A LA CRISIS ante la destitución del Director y del Consejo de Redacción de la revista “ECONOMISTAS”

Con sorpresa y profunda preocupación conocemos, a través de la prensa, la destitución del Director de la Revista “ECONOMISTAS” y de su Consejo de Redacción. Hasta el momento la Junta de Gobierno del Colegio de Economistas de Madrid no ha comunicado a los economistas las razones de tal decisión, por lo que sólo contamos con los argumentos que aparecen como declaraciones del Decano a un articulista de El País*: “hay que renovar y hay que reducir costes”.

Ya el aspecto formal provoca desasosiego. Una medida de tanta trascendencia para la vida de la corporación no merece, al parecer, siquiera, una explicación a los colegiados. Hubiera sido más acorde con los usos democráticos contar con la opinión de estos, máxime cuando el resultado de las elecciones ha sido impugnado y se encuentra, por consiguiente, sub judice.

En cuanto al fondo del tema, el argumento de que ”hay que renovar” es un insulto a la inteligencia. Las cosas se renuevan si hay criterios que lo justifiquen.

Emilio Ontiveros fue el autentico creador de ECONOMISTAS y su labor, junto a su equipo en el Consejo de Redacción, ha conseguido que la revista se mantuviera durante tres décadas como la mejor revista de economía que se edita en España. La calidad de sus contenidos y la absoluta pluralidad de sus enfoques la han hecho acreedora del reconocimiento y admiración, no sólo en el ámbito de los economistas, también entre un público mucho más amplio. ECONOMISTAS ha aportado grandes dosis de prestigio a un Colegio que no está, precisamente, sobrado de ello.

Con todo el respeto a nuestro colega Jaime Requeijo, Catedrático emérito tras una dilatada trayectoria profesional, mentor académico del actual Decano y miembro de FAES, no alcanzamos a entender los criterios que sustentan la renovación, a no ser que esta se cifre en los conocidos posicionamientos ideológicos del propio Decano, lo que supondría un grave atentado a la libertad de expresión e información.

Tampoco se entiende lo de que “hay que reducir costes”. En estos tiempos, esta frase parece dar patente de corso para cualquier tipo de decisión, por muchas ineficiencias que comporte. El presupuesto del Colegio mantiene el equilibrio entre ingresos y gastos. Es decir, la revista se paga con las cuotas de los colegiados. Seguramente, para la mayoría de los economistas colegiados, la revista es una de las pocas actividades que justifican su vínculo con el Colegio. Nos atrevemos a decir que soportan con gusto el coste de esta partida. Reducir los costes de la revista supondría disminuir las cuotas o dedicar el ahorro a otras líneas de gasto. ¿Qué otras partidas serían más valoradas por los colegiados?

La preocupación por las graves decisiones de la Junta de Gobierno del Colegio trasciende a los asociados y se extiende al conjunto de la profesión e, incluso, a otros ámbitos de la sociedad.

Los economistas, colegiados y no colegiados, y otros profesionales, que firmamos este escrito promovido por ECONOMISTAS FRENTE A LA CRISIS, queremos manifestar nuestra absoluta disconformidad y repulsa hacia estas decisiones de la Junta de Gobierno del Colegio de Economistas de Madrid en relación con las cuales exigimos su inmediata rectificación.

Primeros firmantes:

Siguen firmas:

Firma abierta a todos los ciudadanos

http://www.elpais.com/articulo/empresas/sectores/Turbulencias/economistas/elpepueconeg/20120115elpnegemp_3/Tes